Encuentra hoteles baratos e increíbles en Peñíscola, España. Busca y compara los precios de ofertas de alojamiento y encuentra tarifas muy bajas con trivago
Peñíscola: historia, mar y naturaleza en un rincón apartado del Levante español
Peñíscola, o Peníscola en valenciano, es un municipio de la Comunidad Valenciana situado en la costa norte de la provincia de Castellón. El peñón amurallado con el Castillo del Papa en la cima domina el horizonte de las playas de esta localidad bañada por el Mediterráneo en la que historia, mar y naturaleza se combinan para ofrecerte un destino con encanto.
Rincones mágicos
Un buen punto para comenzar la visita es en la Porteta, el sitio ideal para admirar el peñón de orígenes griegos y árabes que caracteriza la costa de esta localidad castellonense. Encontrarás restos del puerto original de la ciudad, una argolla para el amarre de las naves y la propia puerta del antiguo embarcadero, además de la Puerta del Socorro, que conectaba de manera rápida y directa el puerto antiguo con el Castillo.
El Parque de Artillería es un espacio militar en el que confluyen las murallas medievales y renacentistas que hacían de la fortaleza de Peñíscola un lugar inexpugnable. Destaca el polvorín, restaurado como jardín botánico, con especies propias de la Sierra de Irta y con unas estupendas vistas de la zona.
Puedes continuar el paseo por la Plaza de Armas, donde el 8 y el 9 de septiembre de cada año tienen lugar Les Danses, una manifestación folclórica ancestral en la que se hacen unas danses procesionales en señal de devoción a la Mare de Déu de l’Ermitana , a cuyo santuario se dirigen los dansants en parejas.
Sin duda, lo más llamativo de Peñíscola es el Castillo del Papa Luna, que corona la parte más elevada del peñón perfilando el horizonte de la costa. El edificio, construido por los Templarios sobre los restos de una antigua alcazaba árabe, cuenta con muros de piedra labrada y dependencias cubiertas con bóvedas de cañón. Muy cerca encontrarás hoteles como el Hostal Casa Juanita, un alojamiento barato situado en pleno casco antiguo.
Digno de ver es también el Faro, la construcción que más llama la atención del visitante que cruza la puerta principal del Castillo y, además, uno de los edificios más emblemáticos de la película Calabuch, rodada por Luis García Berlanga en 1956. Para quienes quieran aprender sobre la historia de Peñíscola, una visita al Museo del Mar, ubicado en el antiguo edificio de Les Costures, permite conocer más detalles sobre la historia marinera de la localidad.
A las afueras de la ciudad, el parque natural de la Sierra de Irta es el lugar más adecuado para conocer la fauna y flora de la zona. En sus alrededores encontrarás alojamientos como el apartahotel Font Nova, con piscina y terraza en la habitación y a muy poca distancia de la reserva natural.
Ciudad marinera
Desde la lonja del puerto, donde cada día de lunes a viernes se hace una subasta de pescado, hasta las calas y playas que conforman la costa de Peñíscola, aquí el mar es siempre el protagonista.
Tienes múltiples opciones para disfrutar del mar: en moto acuática, dando un paseo en golondrina o realizando cualquiera de las actividades que proponen en la Estación Náutica Benicarló-Peñíscola Costa Azahar.
Las 11 playas de aguas cálidas y tranquilas resultan también muy tentadoras. Playas como Basseta, Argilaga, Torrenova o del Pebret y calas como Badum, del Volante o L´Aljub son perfectas para pasar una jornada de sol y mar antes de volver al hotel a descansar. Aunque también puedes salir a disfrutar de la noche y tomarte una copa junto al mar, relajarte en una terraza chill-out a los pies de la muralla o bailar hasta el amanecer en las discotecas del casco antiguo.
Tanto dentro de las murallas del peñón como en las extensas playas que hay en el exterior, los hoteles y apartahoteles se adaptan a todos los gustos y presupuestos, con ofertas atractivas para disfrutar de unas buenas vacaciones junto al mar sin gastarse una fortuna.
¡Vamos a la playa!
La estación de ferrocarril Benicarló-Peñíscola es la puerta de entrada para los que elijan el tren como medio de transporte desde ciudades como Valencia, Barcelona o Madrid. Una vez en la estación de tren, el autobús te dejará muy cerca de tu hotel o apartahotel en Peñíscola.
El aeropuerto internacional de Valencia-Manises es el más cercano y se encuentra a tan solo 150 km de distancia. Y para los que decidan ir en coche, el acceso a la ciudad es muy sencillo por la Autovia A-7.
Cuerpo sano en mente sana
Una buena excusa para ir a Peñíscola es pasar unas vacaciones de relax y tranquilidad en uno de sus hoteles con Spa y centro de salud , como el Hotel Don Carlos de Peñíscola, un hotel de cuatro estrellas perfecto para olvidarse del estrés de la rutina diaria.
Además de lo anterior, en esta localidad costera del Mediterráneo disfrutarás de una amplia variedad de platos tradicionales sanos y saludables. El all i pebre de rape, el suquet de pescado, los caragols punxents, las cigalas o los langostinos son solo algunos ejemplos de su riqueza gastronómica. Y la mejor forma de degustarlos es en un restaurante de la ciudadela antigua o a orillas de los 5 kilómetros de playa que recorren Peñíscola.
¿Peñíscola solo en verano?
En Peñíscola tienes 365 excusas al año para ir a practicar tu deporte preferido, disfrutar de tu tiempo de ocio, relajarte junto al mar o darte un paseo por la historia. La oferta de alojamientos es amplia, desde hoteles baratos hasta hoteles de lujo con servicios de balneario.
Cualquier momento es bueno para planear una escapada de última hora en familia, en solitario, en pareja o con amigos y empaparte del Levante español en esta acogedora y entrañable localidad de la Costa de Azahar.