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LAGOS: AL SUR DE PORTUGAL
Lagos es una ciudad portuguesa situada en la turística región del Algarve, en el distrito de Faro. Acércate y descubre sus historias de piratas, navegantes y guerras napoleónicas, y disfruta de la Costa Vicentina, que destaca por sus espectaculares playas abrigadas por acantilados y bañadas por el océano Atlántico.
DE TURISMO POR LAGOS
Un buen punto para empezar tu recorrido por la ciudad más visitada del Algarve , Lagos, es la céntrica plaza Gil Eannes, donde se ubican el ayuntamiento y la oficina de turismo. La plaza debe su nombre a un importante navegante del siglo XV que ha pasado a los libros de historia por ser el primero en rebasar el africano cabo de Bojador.
Continúa hacia la iglesia de San Sebastián, un edificio catalogado como Monumento Nacional de Portugal y situado en la zona alta de la ciudad. Para acceder aquí puedes ahorrarte parte del camino con el ascensor de pago que hay en el interior del cercano mercado. ¡Las vistas desde la torre del campanario merecen mucho la pena!
Tras la visita a la iglesia, prosigue hacia la plaza Infante D. Enrique, lugar donde se hallan el antiguo mercado de esclavos, la iglesia de Santa María, el hospital militar, la casa Dízima, el almacén del regimiento y la parte posterior del castillo de los Gobernadores. Además, el actual museo de la ciudad, la Iglesia de San Antonio, está a tan solo un paseo por la avenida de los Descubrimientos. El templo destaca por la decoración barroca del interior y la llamativa fachada exterior, fruto de la reconstrucción tras el terremoto que sufrió Lisboa en el año 1707.
Avanzando por el paseo marítimo en dirección a la desembocadura del río Bensafrim llegarás al Forte Ponta da Bandeira, una fortaleza construida a finales del siglo XVII y de la que se conservan el foso, el puente levadizo y la puerta de acceso. Frente a ella se alza el castillo de los Gobernadores , protegido por un conjunto de murallas con almenas.
Alojarse en el centro de Lagos es una buena opción, ya que está repleto de hostales y hoteles baratos y con encanto, como Mar Azul, que te permitirán dormir en el corazón de la localidad por un precio más que razonable.
COSTA VICENTINA
Nada mejor que tumbarse sobre la arena de una playa bajo el sol del Algarve y sentir la brisa del Atlántico acariciándote la piel para empezar a creer que estás en el paraíso. Así es la costa de Lagos, salpicada de pequeñas y grandes playas, unas rocosas, otras de fina arena e incluso algunas ocultas tras grutas y acantilados.
La playa de la Batata, delimitada a un lado por un muelle y al otro por unos suaves acantilados, cuenta en la entrada con un paseo peatonal con tiendas, cafeterías y restaurantes ideales para dar un bocado a la gastronomía típica de la ciudad. La playa de los Estudiantes está a continuación de la anterior y refugiada del viento y las corrientes marinas por un acantilado. Se accede a ella mediante una escalinata que baja desde el núcleo urbano de Lagos y está comunicada con el resto de playas a través de túneles excavados a mano. La playa de Pinhão es la escogida por los amantes del buceo por su tranquilidad y sus aguas cristalinas. Es una playa de pequeño tamaño y unida por un sendero a través de los acantilados con la playa de Dona Ana, una hermosa playa rodeada de formaciones rocosas y perfecta para practicar esnórquel y observar la fauna y la flora marinas. Además, cuenta con un restaurante-cafetería para apaciguar el hambre y la sed en los días más calurosos.
A la playa de Camilo puedes llegar en coche, y, después, solo tendrás que descender por una escalera de madera para pisar la arena. Las rocas de formas caprichosas crean un conjunto que no te dejará indiferente y que podrás recorrer a bordo de una de las embarcaciones turísticas que hacen excursiones por la zona. La playa de la Boneca, de difícil acceso, es un premio para los que se atrevan a recorrer el camino que conduce a ella: una playa semisalvaje, solitaria y de una sorprendente belleza. Otra playa del mismo estilo es la del Canavial, que también presenta un camino dificultoso para el que quiera bañarse en sus aguas, aunque está a poca distancia de uno de los mejores hoteles de Lagos: el hotel de cinco estrellas Cascade Wellness & Lifestyle Resort, un establecimiento moderno y elegante con unas cuidadas y completas instalaciones. Más inaccesible aún es la playa de la Balança, ya que solo se puede llegar por mar al estar rodeada por un enorme acantilado. Si decides visitarla, no olvides llevarte la cámara de fotos para captar los sobrecogedores colores de la puesta de sol.
La playa de Porto de Mós es de grandes dimensiones y cuenta con buenos accesos, duchas, baños publicos, alquiler de hamacas y restaurantes, mientras que la playa de Meia Praia, con un arenal de unos 4 kilómetros de longitud, es la más frecuentada por los amantes de actividades como el windsurf, el surf, el buceo o los paseos en moto de agua o en lancha. Por último, la playa de Ponta Da Piedade es quizás una de las más visitadas y fotografiadas de Portugal. Dispone de un pequeño embarcadero donde ofrecen paseos en barca por las playas y las calas a las que no se puede llegar a pie y en las que verás las más extrañas formaciones rocosas creadas por la bravura del mar y el fuerte viento.
LAGOS CON BUEN SABOR DE BOCA
En Lagos, una población para la que el mar es una inigualable fuente de recursos, lo lógico es que el ingrediente imprescindible sea el pescado. Y así es, pero a diferencia del resto de Portugal, donde abundan los platos a base de bacalao, en esta ciudad (como en el resto del Algarve) son las sardinas, las lubinas y las doradas las variedades estrella. Estos pescados, combinados con el mejor marisco, dan lugar a una de las recetas más tradicionales de la zona: la cataplana, un nombre que hace referencia al recipiente en el que se prepara. Y como bebida de acompañamiento, qué mejor que un vino Verde , de sabor dulce y bajo contenido en alcohol.
LAGOS DESDE UN MIRADOR
Echa un último vistazo a Lagos, pero esta vez desde el mirador de Chão Queimado, una explanada que te permitirá obtener una estupenda vista panorámica de la bahía y las playas. La imagen quedará grabada en tus retinas y será el mejor recuerdo que te podrás llevar de unas merecidas vacaciones al sur de Portugal.