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ALICANTE: LA CAPITAL DE LA COSTA BLANCA
La capital de la Costa Blanca, Alicante, es una antigua ciudad marinera habitada desde tiempos de los cartagineses y que en la actualidad destaca por ser un importante centro turístico y de servicios. En el casco histórico aún se conservan estrechas y agradables callejuelas situadas al abrigo del omnipresente castillo de Santa Bárbara, que domina el horizonte de la ciudad desde lo alto del monte Benacantil. Y, sin necesidad de salir del núcleo urbano, se puede disfrutar de extensas y atractivas playas bañadas por el Mediterráneo, como la famosa playa de El Postiguet. Alicante es una ciudad viva y bulliciosa que te ofrece todo lo necesario para pasar unas estupendas vacaciones repletas de sol, playa, historia y diversión. ¿Qué más se puede pedir?
A TRAVÉS DE LA HISTORIA
Recorrer las calles de Alicante dando un agradable paseo permite conocer de cerca la historia de esta animada ciudad mediterránea. Uno de los principales puntos de acceso a la ciudad es la zona de la estación de tren, por lo que puedes empezar aquí mismo tu ruta. Junto a la estación, en la plaza de La Estrella, nace la avenida Maisonnave, una importante calle comercial llena de tiendas de las marcas más conocidas. Al final se encuentra la avenida de Federico Soto, que comienza en la plaza de los Luceros, una de las más emblemáticas de la capital alicantina. Entre esta parte de la ciudad y el casco antiguo te irás cruzando con algunos de los edificios más destacados, como el Teatro Principal, de estilo neoclásico; el Mercado Central, de estilo regionalista y levantado sobre las antiguas murallas, o la popularmente conocida como Casa de las Brujas, que mezcla elementos modernistas y eclécticos. Y si a mitad del camino necesitas hacer alguna parada, también pasarás por sombreados jardines y plazas, como la de Gabriel Miró o la de Portal de Elche, que invitan a sentarse unos minutos y empaparse del ambiente urbano. Si buscas un hotel barato en esta zona, tienes varias opciones entre las que escoger, como el sencillo y económico hotel Marítimo.
La plaza Puerta de Mar, situada frente al Mediterráneo, es una de las puertas de acceso al casco antiguo, un barrio formado por estrechas y antiguas calles llenas de edificios históricos, comercios, restaurantes y locales de ocio nocturno que crean la mezcla perfecta. En un lateral de la plaza está la llamativa casa Carbonell, que destaca por su resplandeciente e imponente fachada blanca, y un par de calles más atrás se abre la plaza del ayuntamiento, cuyo edificio se inscribe en el Barroco y se usa para medir la altitud sobre el nivel del mar del resto de puntos de España. Justo a espaldas del ayuntamiento están la deliciosa plaza de la Santísima Faz, que resume a la perfección la estética del casco antiguo de Alicante, y la calle Mayor, llena de restaurantes y bares. A pocos pasos de aquí se encuentra la concatedral de San Nicolás de Bari , un templo de exterior sobrio pero que sorprende por el amplio espacio interior, y un poco más alejada se ubica la basílica de origen gótico de Santa María de Alicante , la iglesia más antigua de la ciudad. En la misma plaza de la basílica puedes visitar el Museo de Arte Contemporáneo de Alicante, y unas calles más abajo tienes el Museo de Bellas Artes Gravina, enfocado a la escultura y la pintura regionales. Aunque si te interesan los museos, el que no deberías perderte es el MARQ (Museo Arqueológico Provincial de Alicante), un moderno museo que aprovecha las nuevas tecnologías para sumergir al visitante en un interesante recorrido a través de las distintas culturas que han ido pasando y dejando sus huellas en la provincia. Para estar cerca de todas estas atracciones, lo mejor es optar por uno de los hostales y hoteles baratos que hay en la zona, como el hotel de cuatro estrellas Eurostars Mediterránea Plaza, un alojamiento elegante, con encanto y que propone excelentes ofertas que te permitirán dormir en el corazón de la ciudad por mucho menos de lo que imaginas.
Seguro que a lo largo de tu recorrido no has podido evitar fijarte en el castillo que se alza sobre la cima de un monte dominando el horizonte de Alicante: se trata del castillo de Santa Bárbara, construido a casi más de 150 metros de altura, en el punto más elevado del monte Benacantil. El castillo data de la época de la dominación musulmana, aunque adquirió el nombre actual cuando el infante Alfonso de Castilla logró tomarlo en el siglo XIII, y en él se distinguen tres recintos de diferentes épocas. A pesar de su ubicación, acceder al castillo no es ningún problema, ya que se puede llegar en vehículo propio, en autobús e incluso a través de un ascensor que sale de la playa de El Postiguet.
JUNTO AL MAR
Por supuesto, al estar Alicante a orillas del Mediterráneo, no puedes irte sin conocer dos de las zonas más representativas de esta unión entre mar y ciudad: el paseo de la Explanada y la playa de El Postiguet. La Explanada es un amplio paseo marítimo rebosante de palmeras que une el parque de Canalejas y la plaza Puerta del Mar bordeando el puerto. La refrescante sombra de los árboles, la suave brisa marina, las terrazas que lo flanquean y los espectáculos y mercadillos que en él se organizan hacen que sea uno de los puntos preferidos por los alicantinos. En uno de los extremos del paseo, una vez pasada la plaza Puerta de Mar, se sitúa una de las playas más conocidas: El Postiguet. Esta playa es todo un emblema de la ciudad, y es que, además de estar pegada al centro, destaca por la gran extensión de arena dorada, sus tranquilas aguas y el amplio listado de servicios e instalaciones que ofrece, como hamacas, lavapiés, aseos públicos, acceso y atención para personas con movilidad reducida o un paseo salpicado de chiringuitos y restaurantes. El Postiguet está separado del puerto por el muelle de Levante, en el que hay varios bares, discotecas y hoteles, como Sercotel Suites del Mar, un elegante y lujoso hotel que posee un increíble spa con vistas al Mediterráneo.
ALICANTE Y EL FUEGO: LAS HOGUERAS DE SAN JUAN
Si tienes ganas de venir a Alicante y no sabes muy bien qué momento del año elegir, no lo dudes y programa tu viaje para que coincida con la celebración de las principales fiestas de la ciudad, las Hogueras de San Juan. Tienen lugar entre el 20 y el 24 de junio e incluyen distintos actos, como un colorido y animado desfile, mascletás, conciertos y otras muchas actividades que culminan en la emotiva cremà, es decir, la quema de las hogueras diseñadas por las diferentes agrupaciones fogueriles y que adornan las calles de la capital durante varios días hasta que llega el momento de prenderles fuego. Fiesta, luz y estruendo se funden en Alicante para celebrar la noche más mágica del año.